La conclusión se desprende del trabajo de dos economistas de Accenture Argentina, que presentó su estudio en el Coloquio de IDEA.
En una sociedad en la que los "intangibles" empiezan a superar en valor a los productos tangibles, medir el verdadero valor del conocimiento sigue siendo una tarea muy compleja para los economistas.
En su artículo Cómo se mide cuánto vale el conocimiento para un país?, Lanacion.com cuenta cómo Laura Converso y Tomás Castagnino, dos economistas que desde Accenture Argentina lideran equipos de investigación globales, se propusieron medir la economía del conocimiento a nivel local, y compararla con el tamaño en otros países.
"Pese a la frecuente utilización del término Economía del Conocimiento, no existe una métrica que la cuantifique con precisión. Más aún, algunas formas de medición se tornan obsoletas. Por ejemplo, los benchmarks sobre número de patentes por país dejan de tener sentido en la era digital, donde abunda el software libre y las organizaciones colaboran y cocrean bienes y servicios que contienen propiedad intelectual", comentaron Converso y Castagnino.
Como se optó por abordar una definición amplia, que incluye la proporción de conocimiento que hay en cualquier producto o servicio, los economistas optaron por atacar la estimación desde la matriz insumo-producto. El modelo asume que el conocimiento agrega valor en todos los sectores de la economía y, al mismo tiempo, en cada etapa de la cadena de valor. Es decir que los factores productivos contribuyen en forma directa e indirecta a crear conocimiento.
De todas maneras, el matutino tuvo un adelanto: en la Argentina, la economía del conocimiento ya involucra el 22% del PBI. Es un valor bajo cuando se lo compara con otros países. En los Estados Unidos llega al 38%, en España y Japón al 32% y en Holanda al 30%.
De todas maneras, como los sectores intensivos en conocimiento crecen más que el promedio de la economía, el porcentaje subiría al 26% en 2025. Pero según el artículo, podría llegar a ser del 30% si hay un plus de políticas focalizadas en esta área. Según Sergio Kaufman, presidente de Accenture y coordinador del trabajo, en números, este objetivo se lograría si se invierten US$ 5000 millones adicionales por año en ciencia y tecnología, y si se agregan 9900 trabajadores por año provenientes de las carreras "duras" (ciencias, programación, ingeniería, etc.)